Nos cuestionamos por qué los hombres deciden ser padres si realmente no les gusta nada de lo que implica la paternidad.
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El Feminismo de la Reconciliación
El feminismo puede reconciliar a los géneros, siempre que el opresor sea capaz de pedir perdón
Hombre y feminismo es para muchos hombres (y para muchas de las propias mujeres feministas también) un intento por juntar el agua con aceite. No en vano, ante el feminismo los hombres partimos de una posición paradójica y contradictoria: Por un lado, formamos parte del colectivo opresor y nos beneficiamos (incluso involuntaria e inconscientemente) de los privilegios que nos ha otorgado la sociedad por el mero hecho de nacer con pene. Por otro, nos negamos a conformarnos con el rol dominante hegemónico que nos han impuesto mediante nuestra socialización misógina y queremos trabajar y luchar en aras de la justicia y de la liberación de las mujeres de la opresión patriarcal.
Y por ello nos posicionamos en contra de la estafa de las «nuevas masculinidades«: No existe posibilidad de «refundar» la masculinidad para que ésta no sea tóxica. Los propios conceptos de ‘masculinidad‘ y ‘femineidad‘ son parte indisoluble del problema que se intenta erradicar. El género debe ser abolido porque es (en sí mismo), un contructo ideado para perpetuar la opresión machista que sufren las mujeres.
En esta categoría abordaremos cuestiones feministas desde nuestra perspectiva, pensamientos, sentimientos, etc recordando en todo momento que nuestro papel no es liderar el feminismo, sino facilitar su avance.
Nos cuestionamos por qué los hombres deciden ser padres si realmente no les gusta nada de lo que implica la paternidad.
Leer másÚnicamente un análisis profundo del fenómeno de la violencia machista extrema y sus antecedentes puede evitar que la violencia vicaria siga sucediendo.
Leer másCuando los hombres decimos determinado tipo de cosas, en realidad es nuestra masculinidad herida la que habla. Desde que las mujeres dieron un fuerte y sonoro puñetazo en la mesa para conseguir el voto y ciertas cotas de igualdad, los hombres estamos heridos en el centro mismo de nuestro orgullo preguntándonos ¿Cuál va a ser ahora mi papel en la sociedad?
Leer más¿Qué podemos o debemos hacer los hombres para contribuir al feminismo?
Honestamente, no lo sé, pero quizá no sea un mal punto de partida: admitir que no sabemos cómo poner nuestro granito de arena, ni siquiera cuál debería ser este. Lo primero es dar un paso atrás, para poder empezar a dar pasos al lado, codo con codo con nuestras amigas y compañeras.
Los hombres hemos sido, en mayor o menor medida, educados y socializados para violar a mujeres. Antes de escandalizarte, sigue leyendo.
Leer másRecopilación de insultos y ad hominem que los hombres sufrimos por el mero hecho de defender públicamente el pensamiento feminista.
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