Hoy creo que puedo decir que se me da bien conducir pero lo cierto es que, si pude aprender fue, en parte, porque soy hombre. Porque detrás de mí hay una cultura patriarcal que opina que conducir es «cosa de hombres» y que por tanto a mí necesariamente se me tenía que dar bien hacerlo. Y afirmo esto porque soy consciente de que muchas mujeres no han tenido mi misma suerte ni han disfrutado de mis mismas oportunidades por el único motivo de su género.
Leer más